El gimnasio de la
vida
22 de enero,
2009
Queridos
hermanos,
La idea de enviar
estas cartas por medio del Internet ha resultado ser un
éxito inesperado. Me habéis animado
a seguir escribiendo, y sé que todo lo que se puede
hacer para el Señor no es en vano. Por favor, si
conoce a personas que no están recibiendo estas cartas
pero que quieren recibirlas regularmente, envíenme sus
e-mails, incluso de personas que no son parte de nuestra
obra. La
Palabra viva de Dios se debe extender
por todo el mundo.
Aquí a
continuación os añado algunos extractos de varias de las
cartas que he recibido:
“Querido hermano Daniel, le doy gracias por
esta hermosa idea de usar este medio que para tantas
cosas vanas se da utilidad, y poder traer la bendición
de leer palabra fresca y sana de Dios, de la cual
estamos tan necesitados, y gracias por el privilegio de
estar incluido entre los que regularmente reciben sus
escritos.
Tomo como de Dios, en lo personal, esta última
carta, sabiendo que es la respuesta a la tristeza que se
agarra a mi corazón y a mi garganta en estos últimos
tiempos… Es
un gozo verle a usted tan en forma, y mas sabiendo de
los vientos recios que le han soplado estos últimos
años…”
“¡Que buena carta! Que maravilla
este medio de comunicación. Debemos de
intentar promover entre los jóvenes y no tan jóvenes, la
distribución de estas cartas y la palabra
evangelizadora.
Saludos y abrazos de tus hermanos Pacha y
Anita.”
“Gracias por sus cartas a las Iglesias,
porque verdaderamente nos alientan, nos reafirman y
damos gracias a Dios por su apoyo. Hemos leído la
de este mes "Preparándonos para un cambio en 2009" y
Dios nos ha hablado, siga adelante, necesitamos de su
esfuerzo en la medida de lo posible.”
“La gente esta muy animada con las
cartas…
Dios nos esta hablando de mantener la fe y una
buena consciencia, para llegar a ser perfeccionados en
la santidad, y ser conformados mas y mas a la imagen de
Jesucristo.
Todo esto, especialmente LA
SANTIDAD, es lo que quisiéramos
transmitir a los jóvenes.”
“"Me encanta lo que dice en su carta de la
dieta, de comer fruta, verduras etc. Veo que estas
hecho un experto en nutrición, pareces medico, veo que
tienes muchas ganas de vivir y disfrutar la vida y
seguir evangelizando y te cuidas y te cuidan mucho las
dos mujeres que tienes alrededor. Sigue
escribiendo, porque siempre nuestro Señor tiene algo que
decirnos.”
“Las cartas han sido de bendición, hasta
Antonio del Valle que estuvo compartiendo el domingo con
nosotros las mencionó, ¡tu padre es un guerrero! Dale muchos
abrazos y bendiciones de nuestra parte.”
“Muchísimas gracias por sus cartas, ya que
vemos en ella la Palabra de
Dios para estos días en los cuales estamos
viviendo.”
“Papa Daniel recién acabamos de recibir la
carta del día 19 y también en días pasados el
12,
ha sido de mucha bendición y esta
ultima nos confirma el reto que hace unos días le
lanzábamos a la Iglesia de
pararse en fe y arrebatar al diablo todo lo que les ha
quitado, empezando desde sus vidas personales y
terminando por sus familias; les animábamos a no
conformarse y entrar en una nueva dimensión de la
manifestación del poder y Señorío de nuestro Señor Jesús
en sus vidas.”
El Gimnasio de la
vida
“Por
tanto, no desmayamos… Porque esta leve
tribulación momentánea produce en nosotros un cada vez
más EXCELENTE Y ETERNO PESO DE GLORIA; no mirando
nosotros las cosas que se ven, sino las que no se ven;
pues las cosas que se ven son temporales, pero las que
no se ven son eternas.” (2ª Corintios
4:16-18)
Todos sabemos que
el ejercicio es muy sano. Dentro de los
que creen en el beneficio del ejercicio hay los que lo
practican, y van al gimnasio regularmente o hacen
footing o otra forma de ejercicio. He aprendido que
el ejercicio es beneficioso sobre todo en la juventud y
que no se debe esperar a la vejez para ejercitar, pues
la actividad que antes fortalecía mis músculos, ahora
causa dolores y artritis.
Hay otros que
compran videos de ejercicios y aeróbic, pero sentados
mirándolos pueden disfrutar de ver como otros sudan pero
no le sirven de nada si no se levantan y lo
practican.
¿A dónde voy? Parece que esta
vida es un gimnasio, lleno de diferentes aparatos para
ejercitar cada músculo del cuerpo. En el principio
algunos ejercicios producen bastante dolor. Nadie en su
juicio cabal le gusta pasar pruebas y sufrimientos, pero
pueden servirnos para desarrollar músculos espirituales
y parece que pronto o tarde lo vamos a experimentar.
“Pero
el alimento sólido es para los que han alcanzado
madurez, para los que POR EL USO tienen los SENTIDOS
EJERCITADOS en el discernimiento del bien y del
mal.”
(Hebreos 5:14)
En el texto vemos
que los que son MADUROS tienen sus sentidos ejercitados
para discernir el bien y el mal. Por un lado es
para no ser engañando por falsas doctrinas, maestros y
profetas, y por el otro lado es para poder crecer y
madurar en la vida espiritual; tener un carácter probado
y llegar a ser más como Jesús. Así podremos
comer la carne de la Palabra y no
ser niños necesitando el biberón. Pablo regañó a
la iglesia diciendo que ya era tiempo de que podían ser
maestros y todavía eran alumnos, siempre aprendiendo y
nunca llegando a poner en práctica lo
aprendido.
Hay los que son
adictos a los gimnasios y se han olvidado del propósito
principal de los ejercicios. En vez de buscar
desarrollar el cuerpo y su musculatura para mantener su
salud, lo convierten en un fin en si, un culto al cuerpo
y narcisismo y están siempre mirándose al espejo a ver
su desarrollo muscular.
Eso lo comparo con
los que están estudiando la Biblia para
poder enseñar a otros y mostrar su conocimiento pero en
vez de mirarse al espejo de la Palabra e ir
cambiando y madurando, se glorían en su sabiduría y se
enorgullecen en su conocimiento.
Pero todavía no he
llegado al propósito de esta carta y es de poder ver
algún beneficio en las pruebas y tribulaciones y
necesidades que muchos estamos atravesando.
¿Qué propósito
tiene Dios en permitir lo que estoy padeciendo? Pablo lo
describe bien:
“Y no
sólo esto, sino que también nos gloriamos en las
tribulaciones, sabiendo que la TRIBULACIÓN
PRODUCE PACIENCIA; y la paciencia,
prueba; y la prueba, esperanza; y la esperanza no
avergüenza; porque el amor de Dios ha sido derramado en
nuestros corazones por el Espíritu Santo que nos fue
dado.”
(Romanos 5:4)
Hay músculos que
necesitamos estirar. Hay lecciones
que debemos aprender. Hay áreas de
tinieblas donde no ha llegado la luz, áreas de ceguera
espiritual, y únicamente con estas pruebas se nos abren
los ojos a las áreas de debilidad donde debemos ponernos
la armadura de luz. El gimnasio de
Dios es efectivo aunque nos duele los músculos que no se
han utilizado, áreas donde no hemos necesitado la fe
antes.
Lecciones como: estar contentos
tanto en la abundancia como en la escasez. Estas
experiencias, sea cual sea su origen, son como
ejercicios espirituales de probar nuestra fe y de ver
como vamos a reaccionar. Dios probó a Su
pueblo en el desierto, no en un paraíso, y allí en las
pruebas normales y diarias: falta de agua,
falta de necesidades básicas, la misma comida aburrida,
cansancio y calor, fue allí donde se manifestó lo que
había en sus corazones. Lo que Dios
desea más que nada es nuestra fe y alabanza, aunque se
rompe el corazón.
“Por
lo cual, por amor a Cristo me GOZO EN LAS DEBILIDADES,
en afrentas, en necesidades, en persecuciones, en
angustias; porque cuando soy débil, entonces soy
fuerte.”
(2ª Corintios 12:10)
San Pablo vio que
su aguijón era una salva guardia evitando que aumentara
su orgullo que le causaría la ruina. En
Apocalipsis vemos un cuadro de multitudes que salieron
de gran tribulación y que habían lavado sus ropas en la
sangre del cordero. ¿No seria esto
el propósito de Dios de permitir el sufrimiento y el
dolor, de ir PREPARÁNDONOS para lo que viene,
fortalecernos para la carrera que aun nos
queda?
Los que esperan en
el Señor, correrán y no se cansaran. Necesitamos
tomar el tiempo de esperar en la presencia del Señor, si
no, nos vamos a cansar pronto en este maratón y
quedarnos tirados por el camino.
En Romanos 5:3 el
apóstol explica los beneficios de la tribulación
(problemas, presiones y pruebas).
“Y no
sólo esto, sino que también nos gloriamos en las
tribulaciones, sabiendo que la tribulación PRODUCE
PACIENCIA.”
(Romanos 5:3)
La manera en que
el mundo mira a la vida es que la “Dolce Vita” consiste
en abundancia de todo, mucho tiempo libre para
disfrutar, libertad económica para hacer lo que uno
quiere, o en otras palabras, abundancia, ocio, comer
bien y vivir para disfrutar la vida pues tiene una
sola.
La realidad es
todo lo contrario.
Jesús dijo que la vida no consiste en la
abundancia de lo que uno posee. El profeta
denunció a Israel diciendo que eran como Sodoma y
Gomorra, cuyo pecado era que estaban hartos de todo,
abundancia de ocio, y que se habían olvidado de los
necesitados.
“He
aquí que esta fue la maldad de Sodoma tu hermana: soberbia,
saciedad de pan, y abundancia de ociosidad tuvieron ella
y sus hijas; y no fortaleció la mano del afligido y del
menesteroso.
Y se llenaron de soberbia, e hicieron abominación
delante de Mí, y cuando lo vi las quité.” (Ezequiel
16:49-50)
Tristemente los
creyentes hemos en parte adoptado la filosofía del
mundo, y posiblemente este crisis económica nos esta
dando un toque de alarma, avisándonos de poner nuestros
tesoros donde ladrones no entran ni polilla corrompe,
pues donde esta el tesoro allí estará el corazón.
Dios siempre ha
deseado nuestro amor y fidelidad y llama el amor al
mundo como adulterio espiritual. Lo que no
entiendo es que si es verdad que "el rico con dificultad
se salva" y que es mas fácil pasar un camello por el
agujero de un alfiler, ¿porque todos queremos ser
ricos? Pues
no cabe duda que el amor al dinero, es la raíz de todos
los males y el amar a Dios con todo el corazón, la
fuerza y la mente es el primer mandamiento y el más
importante de todos los mandamientos.
Nuestro ejemplo no
debe ser en los millonarios o estrellas de cine, sino
que Santiago dice:
“Hermanos míos, tomad como ejemplo de
aflicción y de paciencia a los profetas que hablaron en
nombre del Señor.”
(Santiago 5:10)
Hay varias razones
por la cual Dios puede permitir el sufrimiento en el
creyente. A
veces es para disciplina, para llamarnos la
atención.
Si uno hace ejercicio es para ver un cambio en su
cuerpo. Las
disciplinas de Dios son para que cambiemos algo, para
enderezar el camino. Otras pruebas
vienen porque en el mundo en que vivimos el sufrimiento
es la consecuencia de una plantea en rebelión. El cuerpo se
desgasta y los dolores aumentan. Jesús dijo, en
el mundo tendréis tribulación. Lo que debemos
tomar en cuenta es que el hecho de tomar la cruz y
seguir a Cristo tiene su precio. La
independencia, la rebeldía y la auto-suficiencia deben
ser eliminadas del cristiano maduro y DIOS A VECES
UTILIZA MEDIOS DRÁSTICOS PARA CONSEGUIR UN CAMBIO. Él quiere que
todos lleguemos a la madurez y las tribulaciones
producen la perseverancia tan necesaria en la vida de un
santo.
En conclusión, si
te duele los músculos durante esta prueba, es que Dios
te esta estirando y preparando, para que pierdas la
grasa que son los pesos que te impiden correr la carrera
de la fe.
Las pruebas producen paciencia (perseverancia) y
carácter probado.
La madurez espiritual no tiene otro camino, pues
la capacidad de discernir la diferencia entre el bien y
el mal, lo precioso y lo vil, lo que es del Espíritu y
lo que es de la carne, viene por estos ejercicios
espirituales que Dios permite.
El profeta Daniel
nunca iba a conocer el poder de Dios para guardarle de
la muerte en la fosa de los leones, si no hubiera pasado
esa prueba.
Me parece que pasaría unas noches sin dormir
esperando ese evento. David no hubiera
pasado la prueba de no vengarse, si Saulo no estuviera
en sus manos durmiendo en la cueva. Aprobó pues
tenía la oportunidad de librarse de su atormentador y no
lo tomó, en respeto a Dios. Eso se llama
mansedumbre, teniendo la oportunidad de retaliación y no
tomarlo.
“Gozosos en la esperanza; sufridos en la
tribulación; constantes en la oración.” (Romanos
12:12)
Si Pablo no
hubiera tenido bastante tiempo libre en la cárcel para
pensar y meditar, no tendríamos las riquezas de una
tercera parte del Nuevo Testamento.
“Por
tanto, no desmayamos… Porque esta leve
tribulación momentánea produce en nosotros un cada vez
más EXCELENTE Y ETERNO PESO DE GLORIA; no mirando
nosotros las cosas que se ven, sino las que no se ven;
pues las cosas que se ven son temporales, pero las que
no se ven son eternas.” (2ª Corintios
4:16-18)
“Y
sabemos que a los que aman a Dios, TODAS LAS COSAS LES
AYUDAN A BIEN, esto es, a los que conforme a Su
propósito son llamados.” (Romanos
8:28)
Dios tiene muchos
aparatos y medios en su gimnasio, algunos dan miedo,
otros dolores, pero todos nos FORTALECEN para poder
andar y no fatigarnos, y correr sin desmayar.
Que la gracia de
Dios y la comunión del Espíritu Santo le acompañe
siempre.
Amen.
Un abrazo fraternal
en el amor de Cristo,
Daniel |